Información para pacientes
Embolia pulmonar
Esta información ha sido elaborada por el grupo de Educación para la Salud de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI). Pretende que los pacientes conozcan mejor sus enfermedades.
¿En qué consiste la enfermedad?
Es la aparición de sangre que se coaguló en el torrente sanguíneo, es decir hubo una trombosis, y parte de ese material circuló por los vasos sanguíneos hasta llegar al pulmón, allí los obstruyó, y no está permitiendo que exista un intercambio de los gases del aire que entran y salen por el pulmón, y los glóbulos rojos o hematíes que deben captar el oxígeno del aire para llevarlo al todo el cuerpo, y desprenderse del anhídrido carbónico que las células del cuerpo han generado y que debe eliminar el pulmón.
Se estima que en un setenta por ciento de los casos la sangre se coaguló, es decir formó un trombo, en las venas profundas de las extremidades inferiores. Los síntomas tienen habitualmente un comienzo brusco consisten en dificultad respiratoria, lo que llamamos disnea, a veces acompañada de tos y menos frecuentemente con esputo sanguíneos, aumento en la frecuencia respiratoria (taquipnea), dolor torácico, y en casos graves pérdida de conciencia e hipotensión.
¿Podría haberla evitado, y qué debo decir a familiares y amigos para que no la tengan?
Las circunstancias que favorecen la aparición de trombosis en las venas extremidades inferiores también lo son para la aparición de las embolias pulmonares, conviene evitarlas. Por ejemplo, estar muchas horas inmóvil sentado, toma de anovulatorios, y ello especialmente si se tiene varices en ellas.
En algunos casos los enfermos tienen defectos genéticos que hacen que su sangre coagule con más facilidad. Y el riesgo es alto si padece una trombosis venosa profunda, por lo que debe ser anticoagulado.
¿Qué debo hacer ahora para mejorarme?
En presencia de sus manifestaciones, acudir a urgencias. Allí verificarán el diagnóstico y ofrecerán tratamiento, que frecuentemente exige hospitalización, anticoagulantes, oxígeno y una exhaustiva vigilancia en una Unidad de Cuidados Intensivos.
¿Cuál es su pronóstico?
Es una enfermedad seria que conlleva morbilidad y mortalidad, pero que puede resolverse sin dejar secuelas.
La mortalidad varía ampliamente dependiendo de la gravedad clínica de la embolia y está en rangos que van de 1 % hasta más del 50 %.