compartir en facebook Compartir en Twitter compartir en Linkedin

Información para pacientes

Tularemia

Esta información ha sido elaborada por el grupo de Educación para la Salud de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI). Pretende que los pacientes conozcan mejor sus enfermedades.

logo SEMILogo Educación

 ¿En qué consiste la enfermedad?

La tularemia es una zoonosis propia de lagomorfos y pequeños roedores. La enfermedad puede afectar además a las personas, animales domésticos (herbívoros y pequeños carnívoros) y otros mamíferos, aves, reptiles y anfibios; el agente etiológico es Francisella tularensis.

Grupos de riesgo: Agricultores, pastores, ganaderos, veterinarios, cazadores, jardineros, cocineros, matarifes.

La transmisión puede ser cutánea: por contacto directo con el animal portador, a través de pequeñas erosiones de la piel o incluso a través de la piel sana. También por picaduras de garrapatas... o vía de mucosas: bien por inhalación de polvo o ingestión de alimentos o agua contaminados.

No se produce transmisión entre humanos.

El periodo de incubación es de 1-21 días.

La gravedad del cuadro depende de la virulencia de la cepa y del estado inmunitario del paciente y puede variar desde los casos asintomáticos o con síntomas banales hasta un cuadro séptico grave que puede provocar la muerte, y se caracteriza por un inicio brusco con fiebre, escalofríos, cefalea, mialgias, exantemas, artralgias, anorexia, fatiga... La enfermedad puede autolimitarse en este nivel o evolucionar hacia alguna de las seis formas clásicas de la tularemia que muchas veces se superponen y que dependen, fundamentalmente, de la vía de entrada de la bacteria en el organismo.

  • Ulceroglandular: úlcera cutánea en puerta de entrada más adenopatía regional dolorosa. Esta es la forma más típica de tularemia.
  • Glandular: falta la úlcera o ha pasado desapercibida. Adenopatía dolorosa.
  • Oculoglandular: la bacteria entra por la conjuntiva y provoca conjuntivitis dolorosa, úlceras conjuntivales y edema del párpado. Es unilateral en 90%.
  • Faríngea: por ingesta de alimentos o agua contaminados. Fiebre y faringitis dolorosa.
  • Neumónica: enfermedad pleuropulmonar primaria por inhalación o diseminación hematógena.
  • Tifoidea: enfermedad febril sin adenopatías ni otros signos de focalización. Muy difícil de diagnosticar.

¿Qué debo hacer ahora para mejorarme?

Sobre todo las personas en los grupos de riesgo, al presentar alguna de sus manifestaciones acudir a un médico experto.

¿Cuál es su pronóstico?

Las complicaciones son raras (supuración ganglionar) y con tratamiento la mortalidad es menor del 4% incluso en casos de cepas virulentas (tipo A).

Guardiaapp